10 consejos imprescindibles para motivar a tu equipo
1Confía en las personas que te rodean. Si depositas tu confianza en ellos desarrollarán todo su potencial y llegarán a ser los profesionales que esperas que sean.
2Procura que los factores de ‘higiene’ del equipo estén cubiertos con unos salarios dignos, un entorno laboral adecuado y permitiendo que todo el mundo asuma su responsabilidad. Según la Ley de los Dos factores, si esto no se cumple tu equipo nunca estará motivado.
3Se positivo. La motivación tiene un fuerte componente de subjetividad, así que puede ser construida desde la percepción y el lenguaje. No menosprecies la fuerza del positivismo.
4Reconoce los logros de los que te rodean. Marca los objetivos cuidadosamente y celebra que estos objetivos se cumplan. Establece pequeñas victorias si los proyectos son muy grandes o el trabajo es cíclico.
5Pásatelo bien y haz que los demás también se lo pasen bien. Pasamos un tercio de nuestra vida trabajando. Es imprescindible trabajar en un lugar en el que lo pasemos bien haciendo lo que hacemos.
6Cultiva el compromiso de las personas con su empresa. Tu debes ser el primer cliente del producto que estás vendiendo o desarrollando. Si no lo comprarías tu, ¿por qué deben hacerlo los demás? Eso se llama comer la comida de tu perro.
7Trata a las personas con justicia. Premia las actitudes que deben ser premiadas y penaliza aquellas que son incorrectas. Las reglas mejoran la convivencia y hacen que las personas sepan tengan un criterio para evaluar su actitud.
8Sé transparente y nunca ocultes nada. Es importante que exista confianza absoluta entre los miembros de un equipo para fomentar su unidad y su motivación. Esto se logra con comunicación y transparencia.
9Rompe la rutina. Haz que las personas se conozcan fuera de la oficina y ayudales a relacionarse a nivel humano y no solamente a nivel laboral. Los team buildings suelen ser una buena idea para desarrollar estas dinámicas.
10Fomenta la solidaridad dentro de tu equipo y procura que todos ayuden a sus compañeros desinteresadamente de forma altruista. Los equipos solidarios son más fuertes y están más motivados.
Excelente artículo y excelentes consejos. Aunque a primera vista son todos ellos «de sentido común» no conviene olvidar ninguno de estos puntos porque del éxito del equipo depende el éxito personal.
Muchas gracias Pedro. En el mundo de las relaciones personales, que a fin de cuentas es a lo que se reducen en muchos casos las teorías de la motivación, creo que el sentido común es lo que debe prevalecer. Tratar a tu equipo como te gustarían que te trataran a ti, gestionando la presión y los resultados.
Como dice @Pedro, son cosas de sentido común… y que en muchos casos se olvidan. Si todos los equipos funcionaran así de bien las empresas serían mucho más productivas y los trabajadores mucho más felices.
Ya sabes Jordi que yo no creo que haya que reinventar la rueda ni dar con fórmulas mágicas. A u nivel muy básico basta con pensar un poco las cosas, respetar el trabajo de los demás y ser un poco empático.
Muy bueno Daniel. Lamentablemente cuesta ver que estas cosas se pongan en marcha… pero empezaremos nosotros mismos.
La revolución tiene que empezar desde abajo ;)